Keisha Thorpe es profesora en una escuela secundaria de Maryland, en EE.UU.; la mayoría de sus estudiantes provienen de familias de inmigrantes y de refugiados; a fin de mes disertará en la Argentina
La docente Keishia Thorpe apela a las becas en atletismo para que sus alumnos en situación vulnerable accedan a la universidad
Sus alumnos llegan a la clase muchas veces sin saber hablar ni una palabra de inglés. La mayoría proviene de familias de inmigrantes y refugiados de bajos ingresos, y en la International High School Langley Park, en Maryland, ella los recibe con su amplia sonrisa y un desafío: que terminen el secundario y vayan a la universidad. La estadounidense Keisha Thorpe fue la ganadora de la última edición del Global Teacher Prize, que entregó la Fundación Varkey en alianza con la Unesco, en una final que se celebró desde París en formato virtual y en la que también estuvo entre los diez nominados la maestra argentina Ana María Stelman, que trabaja como docente de ciencias naturales en una escuela primaria de La Plata.
Thorpe será una de las 20 conferencistas internacionales que disertarán en el Congreso Internacional de Educación, que se realizará en la provincia de Tucumán entre el 28 y el 30 próximos. Como la mayoría de los ganadores del premio, conocido como el Nobel de Educación por el millón de dólares que entrega como recompensa, Thorpe saldrá de gira por distintos países. En su voz resonará el ejemplo de miles de maestros alrededor del mundo, que trabajan en contextos vulnerables e invierten muchas horas más que las que su empleo les demanda para sostener las trayectorias de aprendizaje de sus alumnos.
Entre sus objetivos como maestra, confiesa que el máximo desafío que les propone a sus alumnos no es sencillo. Muchos de sus estudiantes están convencidos de que la universidad no es una posibilidad para ellos. “Con el aislamiento y el Covid la situación de vulnerabilidad de muchas familias se agudizó. Hay hogares en los que no había dinero suficiente ni para comer, y ahorrar para poder pagar los estudios en la universidad no es una chance para ellos”, dice Thorpe en una entrevista vía Zoom, en medio de un recreo entre clase y clase.
El atletismo, la llave al título universitario
Sin embargo, los números de Thorpe demuestran que sí hay oportunidades, y en eso trabaja esta maestra, que logró conseguir el título universitario gracias a una beca de atletismo que obtuvo cuando llegó desde Jamaica a Estados Unidos. Su propia experiencia la impulsó a trabajar en ese camino, con resultados alentadores que se intensificaron durante el año previo a la pandemia. Solo entre 2018 y 2019, Thorpe ayudó a que sus estudiantes obtengan becas por casi 7 millones de dólares en una docena de universidades. “Cuando digo que mis estudiantes son recién llegados es porque acaban de llegar al país, y la escuela es el primer lugar donde interactúan con otras personas, aunque no hablan inglés. Hay estudiantes de América del Sur o Central, África y el Caribe. También alumnos que llegan de Medio Oriente. Todos son inmigrantes, o refugiados o estadounidenses de primera generación, y más del 90% tiene antecedentes de bajos ingresos y participa del programa de asistencia alimentaria”, cuenta.